Me preocupa tu estado de ánimo. No quiero cansarte con mis historias vividas, sólo quiero animarte a que luches por lo que quieres y valores lo que has conseguido hasta ahora. Para mí no ha sido nada fácil pero sigo luchando por estar cada día mejor.
Te propongo que ESCRIBAS una carta, que dirijas una carta a tu insconsciente en la que expliques...
-cómo te sientes;
-lo que ya no quieres y estás dispuesta a cambiar;
-la vida que deseas y con qué intensidad quieres que se convierta en realidad;
-con qué recursos cuentas para conseguirlo...
Escribe al jefe de vida que hay en ti, a tu propia dirección...
...a aquello que en verdad eres tú;
...a aquel lugar, a aquellas circustancias, sensaciones y experiencias que quieres vivir;
...a tu deseo profundo e impulsor.
Te suena extraño, ¿verdad? y suena extraño porque hemos perdido en gran medida la capacidad de dialogar con nosotros mismos. Por eso, es importante recurrir a la imaginación para vencer la resistencia.
¿Y por qué es tan importante que escribas esta carta a tu inconsciente? Porque escribir una carta es un gesto de reconocimiento del otro, es manifestar una apuesta por la intimidad y una esperanza de respuesta. y cuando las palabras salen del corazón, son además un reflejo sincero de nuestros sentimientos en el momento de ser escritas.
Escribe desde lo más profundo de tus anhelos. Déjate llevar por lo que salga, escribe todo lo que te venga a la mente, escribe y escribe hasta que sientas que no tienes nada más que decir, sin restricciones ni censuras de ningún tipo.
Expresa tus deseos en positivo, evita las fórmulas en las que aparezca un "no". Dales la vuelta, sustituye en "no quiero hacer tal cosa" por "deseo hacer tal otra".
Concreta el deseo, especifícalo. Descríbelo como si ya estuviese realizado al detalle, imaginando nítidamente cómo se convierte en realidad y cómo te sientes tú viviendo en esa situación.
No hagas objeto de deseo a otras personas. Cada cual vive su vida. Cada cual tiene su propia dirección.
Haz un análisis de los recursos internos y externos de que dispones para llevar a cabo tus sueños, sé objetiva. Te darás cuenta de que dispones de muchos de ellos: ilusión, empatía, intuición, entusiasmo, experiencia, valentía, sentido del humor, simpatía, ternura, fuerza, carisma, inteligencia...y muchos otros que podría citar.
Tu tienes un enorme bagaje de recursos internos. No los ignores ni les quites importancia, son muchos y más potentes de lo que imaginas.
Recuerda también que dispones de un recurso externo poderosísimo: darte permiso para pedir ayuda, para contactar y contar con otras personas (me ofrezco voluntaria).
Una vez que la tengas escrita, es muy importante que la firmes, esto implica que te comprometes con tus deseos, que eres tú quien los ha plasmado en el papel y quien los hará realidad.
Que tu niña interior vea claramente que tu adulto de hoy apuesta por sus deseos.
Pon un plazo concreto y razonable de realización, una fecha en la que creas que serán alcanzados. Poniendo una fecha refuerzas tu compromiso. Una vez fijada, el tiempo empieza a contar...con lo que sólo queda comprometerse y empezar a andar....
Acaba la carta con tu compromiso, algo así como:"Declaro que voy a generar, merecer y obtener la realización de estos deseos en tal fecha"
Revísala periódicamente. No la olvides. Leela si te es posible todos los días.
Esta carta activará en ti lo que los psicólogos conocen como "la profecía que se autocumple".
Además, con la firma de la carta se pondrá en marcha "el principio de sintonización". Verás que si tu propósito es firme, empezará a actuar "el principio de atracción de lo semejante" y se generarán situaciones que favorecerán tus deseos.
Puede parecer algo esóterico, pero en realidad es una cuestión de sintonización: dependiendo de la frecuencia con que emites, la vida te responde.
Así que por favor, ve cambiando esos pensamientos negativos y permítete tener errores y aprende de ellos.
Con mucho cariño,
Mamen
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